Hay un momento en la historia del rock inglés en el que se dan cita diferentes personalidades que dan lugar a algunos de los grupos más importantes de la historia del rock.
Nos referimos al elenco de artistas que se encuentran conviviendo en el mismo momento y que pudieron juntarse de cualquier manera para enriquecer algunos de los grupos que surgieron entonces. Todos eran amigos y se conocían, convivían juntos, asistían a los mismos conciertos y colaboraban mutuamente en diferentes bandas.
Cuenta Ron Wood en la última biografía publicada, todo ambientado entre fiestas y drogas, que se barajaban diferentes ofertas para sustituir a Mick Taylor como guitarra en los Rolling Stones, nombres como Eric Clapton o Jeff Beck salen a la palestra, pero pudo haber sido cualquier otro de los que estaban buscando el éxito a finales de los 60 con mayor o menor suerte.
Por ejemplo existía muy buena relación entre Ron Wood y Jimmy Page y quizás fue una casualidad que el guitarrista se uniera a Robert Plant para formar Led Zeppelin porque pudo acabar en cualquier otro grupo.
Ron Wood tenía muy muy buena relación con Rod Stewart, juntos formaron uno de los grupos más interesantes que inauguraban la década de los 70, The Faces, un grupo que acaba de editar un recopilatorio bajo el título Stay with me. Ellos ya habían colaborado junto con Jeff Beck y en otro grupo que se llamaba The Small Faces.
Solo tenemos que imaginar que hubiera ocurrido si el guitarrista de esa banda hubiera sido Jimmy Page o que el cantante en vez de ser Rod Stewart hubiera sido el mismísimo Robert Plant.
Todos están juntos a mediados de los 60, todos se conocen y colaboran, pero la historia del rock pudiera haber sido diferente si se deciden a hacer o juntarse de forma distinta.
Siempre acusaron a Ron Wood de acabar con The Faces, pero le llamaron nada más y nada menos que los Rolling Stones, una banda que se encontraba en otro nivel, varios pasos por delante de cualquiera en ese momento, siendo ya en 1975 una máquina de fabricar dinero, con sus discos y sus conciertos. Para Ron Wood Faces era un buen grupo pero solo algo divertido comparado con la idea de incorporarse a sus "majestades".
Mientras Rod Stewart se negó a seguir grabando con The Faces, el ego del artista le llevó a trasladarse a Los Angeles y a explotar esa voz tan particular cascada con éxitos como Sailing, Do you think I´m sexy, Passion o Tonight I´m yours.
Stay with me es solo un ejemplo de la vitalidad del rock inglés a finales de los 60 y de lo buenas que eran las bandas cuyos componentes podrían haber dado lugar a cualquier grupo, que destacaría del resto sin ninguna duda.
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